sábado, 22 de agosto de 2015

LLEGA A LIBRERIAS LA INCONCLUSA LEY DE MEDIOS




LLega a las librerías. 
En mi primer libro: 
una reivindicación de la construcción colectiva 
de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual y una interpelación a la matriz comercial de la comunicación argentina.
Uno de los logros mas importantes de CFK es una
deuda pendiente para todo el 
Proyecto Nacional y Popular.
Con prólogo de Carlos Ulanovsky 
impreso por el sector cooperativo. Colección La Siringa de Editorial Peña Lillo-Continente

Piccone: 
"No se trata de que los ricos y famosos manejen la comunicación masiva mientras los talentosos pero pobres queden reducidos a la ocupación de espacios marginales.
… el gran triunfo de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual es el de haber establecido un piso que ningún gobierno (democrático) podrá derogar." 

Carlos Ulanovsky:
"Valioso texto de autor con  perfil de testigo importante, hombre que sabe de qué habla porque estuvo metido en la creación y en la aparición de la nueva ley y eso no desapareció de su cabeza.el libro tiene desde su título dos expresiones que lo definen. Inconclusa, llama a la ley, no solo porque esas chicanas legales no terminan de que se exprese en totalidad, sino por todo lo que será capaz de cambiar en un futuro si , como muchos esperamos , sigue su camino de cambio . Y también es importante el calificativo de “ historia menos contada”. No es que no se haya hablado de la ley hasta ahora. Sí se hizo y en detalles abundantes, pero Piccone eligió hablar desde costados originales y poco frecuentados. De ahora en adelante y sobre ciertos aspectos, ya nadie podrá alegar ‘ Ah, no sabía."

ALGO MAS QUE UNA LEY.
La Ley de Medios es algo más que una ley.
En su momento actuó como catalizador de diferentes deseos de la sociedad y de los gobernantes e inclusive se convirtió en una causa nacional para los jóvenes que se iniciaron en la política en la primera década del siglo XXI.
La Ley de Medios cabalga sobre dos objetivos primordiales: desmonopolizar y promover la multiplicidad de voces. A contrapelo del mito fundacional de la radiodifusión argentina, monta una estructura que interpela la concepción comercial de la comunicación, por la que se considera una mercancía sujeta a los vaivenes del mercado.
Una ley no cambia las relaciones de fuerza de una sociedad, pero, en el caso que nos ocupa, sirvió para desnudar el dispositivo técnico, económico y político que tiene, en los medios, el más sofisticado escenario de relaciones de poder.
La ley tampoco modifica las relaciones de poder. Pero desde su gestación a través del mecanismo participativo de construcción demostró su eficiencia para denunciar, cuestionar e interpelar al poder que rige las relaciones sociales, económicas, políticas y culturales surgidas en la sociedad neoliberal.
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LA COMUNICACIÓN NO PUEDE DEPENDER DEL MERCADO
La aplicación definitiva de la Ley de Medios, que implica un cambio de paradigma, requiere una modificación también de la visión que la política en general tiene del rol del Estado y de la inclusión del ciudadano.
En el trasfondo de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual subyace un concepto nuevo de lo público. La ley define la desmonopolización del sector privado comercial, define lo público estatal, universitario y religioso pero fundamentalmente otorga una reserva del 33 por ciento del espectro radioeléctrico para los medios públicos no estatales, reconocido en el texto de la legislación como privado sin fines de lucro.
A este sector no se le pueden aplicar, para su sostenimiento, las leyes del mercado. Por eso, si bien la Ley de Medios no contempla la sostenibilidad del nuevo sistema de medios, deja abierto ese tema.
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